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IV. Ecomaterialidad, límites y escalas de una huella de carbono y de una producción de basura y
Quisiera ahondar en varios puntos, algunos de ellos ya intro- contaminación considerables. A diferencia de otras formas
ducidos en las secciones anteriores, que a pesar de su impor- de expresión artística como la literatura, la música, el teatro
tancia siguen siendo omitidos por la mayoría de educadores o la danza (que pueden realizarse sin apenas otros medios
e investigadores. Estos puntos no solo reclaman una aten- que el cuerpo humano), el cine y el video no pueden existir
ción prioritaria en aquellos cursos universitarios o trabajos ni operar socialmente sin ese fundamento tecnológico-in-
de investigación cinematográfica específicamente dedicados dustrial y la abultada mochila socioecológica que conlleva.
a cuestiones medioambientales, sino que también deberían Para empezar, la fabricación de las cámaras, proyectores, fo-
incorporarse a cualquier discusión sobre cine, sea cual sea cos, ordenadores, tabletas, teléfonos móviles y otros apara-
el contexto o el foco central de la misma. Recordemos que tos requiere una masiva extracción de recursos minerales,
todo cine es ecocine, que toda pedagogía es ecopedagogía, incluyendo minerales raros, y un complejo procesamiento
y que la alfabetización socioambiental y ecomediática debe industrial a un coste humano y ecológico devastador. Todas
ser un componente fundamental de la alfabetización sin ad- las fases de la producción, distribución y consumo del cine
jetivos. Escribir o enseñar sobre cine (o usar cine en cur- y medios audiovisuales tienen también un grave impacto:
sos de lengua o de cultura) silenciando u ocultando su di- el rodaje de una película requiere enormes cantidades de
mensión socioambiental supone transmitir implícitamente electricidad para las cámaras, la iluminación y demás equi-
el mensaje de que el cine existe en su propio universo al pamiento; la construcción de decorados necesita toneladas
margen de la realidad material y de los límites biofísicos del de materiales; el transporte, catering, suministro de agua,
planeta; que no hay emergencia socioambiental, o que si la etc. comporta un gasto tremendo de combustible; la acti-
hay, no es importante, o que ni el cine ni la enseñanza tie- vidad de cientos de personas y vehículos durante las sema-
nen nada que ver con ella. Silenciar u ocultar la dimensión nas que puede durar un rodaje erosiona el terreno y afecta a
socioambiental del cine en nuestras clases o en nuestra in- los ecosistemas, a veces de forma irreparable. El 95% de los
vestigación es una decisión política que contribuye a perpe- materiales usados en una producción no se recicla ni reu-
tuar historias de dominación y a justificar el ecocidio. tiliza (http://lab.cccb.org/en/eco-friendly-practices-in-the-
El primer punto es el de la materialidad del cine y el vi- film-industry/). A su vez, la distribución y el visionado de
deo. Uno de los elementos centrales del concepto de ecome- las películas tiene un elevado coste ambiental en forma de
dia / ecocine es precisamente que el cine, el video y los de- gases de efecto invernadero, polución y basura, mucho más
más medios audiovisuales son recursos materiales extraídos exacerbado en el caso del video digital, que depende de ca-
del planeta, inseparables de una determinada tecnología, de bles, satélites y granjas de servidores de extraordinaria vora-
una infraestructura industrial, de un consumo energético, cidad energética. Para 2025, las tecnologías digitales serán
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Revist a de al ce s XXI Número 7 , 2025

