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ca hacia las otras mujeres, evidencia también de una miso-  contemporáneos?  Para esbozar algunas respuestas, me val-

 ginia incorporada en el yo, a pesar de que el sujeto narrati-  go, en primer lugar, de un análisis de las dos novelas por se-

 vo sea una mujer lesbiana, la protagonista se identifica con   parado para ver cómo sexo y maternidad se enlazan en ellas.


 el ‘permafrost’, esa capa de hielo que nunca se derrite. En   Así, en la primera y segunda parte de este artículo, consi-

 el caso de Boulder, la llegada de una hija deseada por la is-  dero que en las dos novelas se entrevé cómo la maternidad

 landesa Samsa, la pareja de la narradora, supone un distan-  de una mujer cis lesbiana, a pesar de ofrecer resistencia, no

 ciamiento infranqueable entre las dos mujeres y el final de   puede desvincularse de las políticas del consumo y del im-

 su relación física y sentimental. Esta separación no parece   perativo social contemporáneo de la maternidad como pro-


 una sorpresa para la protagonista, cuyo nombre significante,   mesa de seguridad y felicidad en las sociedades neoliberales,

 boulder —una roca de grandes dimensiones—, simboliza la   como han indicado Sarah Ahmed en The Promise of Ha-

 soledad y dureza con la que afronta la vida. Este aislamiento   ppiness o Edgar Cabanas y Eva Illouz en Happycracia. En

 y severidad no impiden que Boulder desarrolle un vínculo   la tercera parte del artículo, considero hasta qué punto el


 con su hija, algo que también le sucede a la protagonista de   planteamiento de la bifurcación de deseos (la elevación del

 Permafrost con sus dos sobrinas, a quienes adopta.   deseo lésbico en su versión más física y la nulidad absoluta

 En las dos novelas, la maternidad ocupa un lugar impor-  del deseo de maternidad), sumado al contexto editorial, es

 tante en el arco narrativo y la evolución de los personajes:   clave en el éxito de estas novelas. El interés que han susci-


 convertirse en madre, aunque sea una opción vital no desea-  tado estos dos libros demuestra que la maternidad y el sexo

 da, implica una brecha por la que surge la ternura, la gene-  lesbiano forman parte de las políticas de edición y de tra-

 rosidad y la sensibilidad de estas dos mujeres en apariencia   ducción en España, pero también nos obliga a cuestionar

 distantes y ariscas. En este sentido, los dos textos de Balta-  hasta qué punto son, estos dos temas, objeto de consumo.


 sar subvierten muchas nociones tradicionales de la mater-

 nidad, pero también comulgan con otras, como la idea de   Permafrost: maternofobia y maternidad lesbiana

 que la maternidad causa una grieta por donde entra la hu-  En Permafrost, la madre y la hermana de la protagonista

 manidad y que ata a las mujeres a la vida y a los otros. Mu-  son dos son mujeres heterosexuales y madres abnegadas que


 cho más importante, los textos de Baltasar plantean varias   han convertido la maternidad en el centro de su vida hasta

 cuestiones en relación con un posible vínculo existente en-  el punto de renunciar a su yo. Esta deserción implica que

 tre maternidad y sexo: ¿qué implica que en estos dos textos   tanto la madre como la hermana entienden la maternidad

 se entrelacen la maternidad y el sexo entre mujeres? ¿Y has-  como sacrificio, como una suerte de obligación, así como


 ta qué punto están estos dos elementos —y la producción   también como un orgullo social. En el caso de la madre,

 y éxito de estas novelas— ligadas a los hábitos de consumo   la renuncia se transfiere en forma de reproches sutiles pero






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 Revist a  de  al ce s XXI                              Número  5 , 2021-2023
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