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Jack Halberstam sobre la masculinidad de las mujeres en su   la representación de la relación de los hombres jóvenes vas-

 análisis de la novela de El Hachmi, DiFrancesco desman-  cos con la historia del nacionalismo euskera en varias pelí-

 tela el patriarcado y redefine las posibilidades de las mascu-  culas estrenadas en el siglo XXI. Ella apunta que películas

 linidades. También con un enfoque sobre la conexión en-  como Tiro en la cabeza (2007) dirigida por Jaime Rosales,

 tre Cataluña y Marruecos, Miquel Pomar-Amer analiza la   Clandestinos (2007) dirigida por Antonio Henz, Todos esta-

 noción estereotipada de la hipermasculinidad de los hom-  mos invitados (2008) dirigida por Manuel Gutiérrez Aragón

 bres y de las mujeres sin agencia de Marruecos en L’últim   y La casa de mi padre (2008) dirigida por Gorka Merchán


 patriarca y Petjades de Nador, la novela publicada en 2013   “continue to raise important questions about the relation-

 de Laila Karrouch. Pomar-Amer arguye que la representa-  ship between masculinity, kinship and national identity”

 ción de la hipermasculinidad en las novelas de El Hachmi y   (“continúa haciendo preguntas importantes sobre la rela-

 de Karrouch facilita la libertad personal de las protagonis-  ción entre la masculinidad, el parentesco y la identidad na-

 tas. Concluye el capítulo con un breve análisis de la ironía   cional”) (215). El conjunto de estas películas expone una

 de la novela Cartes al meu fill (2011) de Saïd El Kadaoui,   reexaminación recurrente de las masculinidades descentra-

 una novela que funciona como parodia de la masculinidad   das. El capítulo de Alfredo Martínez-Expósito, que sigue


 hegemónica. También de interés para los estudios catalanes   el estudio de Song, analiza el vaivén de la representación

 será el capítulo escrito por Maria Van Liew sobre la nove-  de la masculinidad estereotipada y de la “staging of per-

 la de 2009, Rompepistas, de Kiko Amat. Van Liew etiqueta   formed authenticities” (229) en la película Ocho apellidos

 la novela como “the soundtrack of emotional masculinity”   vascos (2014) dirigida por Emilio Martínez Lázaro. La úl-

 (“la banda sonora de la masculinidad emocional”) (200),   tima aportación examina la única obra de teatro del volu-

 ofreciendo un análisis digno de interés sobre la conexión   men: Homes! de la Companyia T de Teatre. La subversión

 entre la novela y la Barcelona posindustrial. La autora seña-  de  códigos binarios  de  los géneros  sexuales  hegemónicos

 la, “What the performance of a new, more vulnerable mas-  ocurre a través de una reexaminación del poder lingüístico

 culinity has achieved is the defiance of any gendered subjec-  en Homes! La obra de teatro emplea técnicas como la paro-


 tivity as the norm, thereby allowing masculinity to develop   dia para burlarse de la masculinidad hegemónica: por ejem-

 real political meaning in collaboration with other local and   plo, el acto que representa una noche de juerga cuando un

 transnational performances” (“la performance de una mas-  hombre intenta ligar con una mujer desconocida y termina

 culinidad nueva y vulnerable ha dado lugar a una resisten-  con las mujeres peleándose con él, o el acto de la descrip-

 cia de la subjetividad de solo un género sexual, permitién-  ción hiperbólica y cómica del orgasmo masculino. La figura

 dole que la masculinidad desarrolle significado político en   retórica de la parodia y la subversión del lenguaje como una

 colaboración con otras performances locales y trasnaciona-  herramienta del patriarcado en Homes! —eco de las pelícu-


 les”) (211). En el siguiente capítulo, H. Rosi Song estudia   las dirigidas por Ventura Pons— subvierten la hegemonía,






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 Revist a   de   alces   XXI                                  Número  3 , 2016-2017
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