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Burbuja inmobiliaria y metonimias arquitectónicas actualidad española esta ola de casas aparentemente desocu-
La economía ultraliberal en regímenes democráticos no es padas en la viñeta liminal del libro [fig. 12].
un fenómeno natural como dejan pensar las metáforas cata-
clísmicas al uso. En la primera imagen del libro Viñetas para
una crisis, la única enteramente coloreada y que, al contra-
rio de las demás, lleva título, “El tsunami” (hubiera podido
ser terremoto, tempestad, racha, etc.), El Roto quiere de-
mostrar que la crisis tiene responsables. La gigantesca ola
roja que intenta surfear un personaje verde en el primer pla-
no está compuesta por edificios fabricados en cadena que se
están precipitando encima del hombre indefenso. Nos dice
el dibujo que la burbuja inmobiliaria está en el origen de la
crisis: es decir, la especulación en el mercado de bienes in-
muebles en España, el excesivo endeudamiento de la indus-
tria de la construcción y de los hogares españoles (alentados
a ello por los beneficios fiscales concedidos por la adquisi-
ción de viviendas y el laxismo en la concesión de hipote- Fig. 12 El Roto, 7
cas bancarias), la financiación ilegal de los partidos, y como
consecuencia, además del coste ecológico, la paradójica in- Conocemos el papel que están jugando la Plataforma de
capacidad del mercado para absorber la ingente cantidad de Afectados por la Hipoteca y Ada Colau, su portavoz, como
vivienda construida y vacía (unas extrañas “ruinas nuevas”) primera fuerza de propuesta política actualmente: la cues-
mientras un creciente número de personas no se pueden tión de la vivienda reviste tal importancia en España que
alojar o se quedan en la calle después de haber sido “des- una viñeta de El Roto soporta dos lecturas. Un hombre sen-
ahuciadas”. Todo ello puede significar para el lector de la tado en los vestigios de su casa que se derrumbó explica:
13
“La casa la diseñó un arquitecto pero la construyó un espe-
culador” [fig. 13]. La casa derruida puede ser la del hogar
13 Se inserta en una estética arquitectónica de la crisis a la que recu-
rren muchos medios de comunicación desde 2008, que sirve para cris-
talizar los excesos del sector y encarnar en negativo el crecimiento del presariales y políticos, las tramas de corrupción y los fuertes impactos
paro: “Con su estatismo esos escenarios arquitectónicos monumentaliza- ecológicos (Foro Ciudadano de la Región de Murcia). Aeropuertos sin
ban los cruces de intereses económicos y políticos que habían produci- aviones, contenedores culturales gigantes por terminar, estaciones para
do el inicio de esa temporalidad de crisis: la confusión de capital público trenes de alta velocidad sin pasajeros, autopistas vacías, urbanizaciones
y privado a través de las cajas de ahorros, la circulación de intereses em- fantasmas...” (Labrador “Un museo”).
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Revist a de alces XXI Número 1 , 2013