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de su trabajo, de su casa y de su colaboración con el colecti-  habla de “una perspectiva caleidoscópica” en esta novela, y

 vo y la posibilidad de ayudar a los demás, de vivir según sus   dice que “esto significa que se trata de una novela dialéctica

 propios criterios. La azotea y el cultivo de algas, es decir, este   en la que interesa ante todo argumentar y discutir, oponer

 “idilio agrícola”, se contrastan con el entorno urbano e indi-  juicios, para que cada cual vaya extrayendo sus conclusiones”

 vidualista de la ciudad de Madrid. Además, la azotea, como   (29). En el Comunicado 7 del ser colectivo, el personaje des-

 frontera entre ciudad y campo, representa la posibilidad de   cribe la relación entre el individuo y el colectivo: “Diré que

 superar un supuesto determinismo ambiental impuesto por   los  seres  individuales  acuden  a  los  seres  colectivos  cuando


 el compás de la vida de Madrid. De este mismo modo, el es-  quieren madurar sin pudrirse, cuando quieren hacer algo y

 cape de Manuela a Parla le permite vivir “entre”: entre clases   el intervalo de una vida no es suficiente en tiempo o en espa-

 socioeconómicas, aunque sólo sea por un rato, y entre la his-  cio” (290). Al citar a Balibar, Hitchcock habla del papel de

 toria de su vida y la posibilidad de otro rumbo. El locutorio   las instituciones (supuestos colectivos) en el desarrollo o no

 de Parla, donde termina escribiendo en su cuaderno Manue-  de la identificación del individuo: “This places special em-

 la, no le ofrece “atmósfera” (133) sino sólo un lugar aparte   phasis on institutions because these are precisely regulative

 donde pensar y tomar decisiones de una manera deliberada.   of identification: they attempt to negotiate two impossibili-


 Manuela dice de este lugar: “Si existe la antimateria, debe de   ties, the prospect of a single identity and that of its infinite

 estar hecha de lugares así” (133).  dispersal” (“Esto pone un énfasis especial en las institucio-

         nes porque estas son precisamente reguladoras de la identi-

 El personaje colectivo   ficación: intentan negociar dos imposibilidades, la posibili-

         dad de una sola identidad y la de su dispersión infinita”; 21).

 El  ser colectivo declara  poéticamente:  “Nieves  habría   Aunque Hitchcock analiza aquí la historia y la historicidad

 sido un buen nombre, al ser en plural te imaginas a muchas   de la construcción de las naciones, sus declaraciones se apli-

 nieves pequeñas, como yo” (115). La presencia del ser colec-  can fácilmente a los ideales ofrecidos por la posibilidad de

 tivo en la novela hace hincapié en la verdadera red de per-  un ser colectivo constructor.


 sonajes interconectados de quienes se componen el reparto   Gopegui enfatiza que el cuerpo tiene sus límites pero que

 y el argumento de la narración. Entonces, el ser colectivo-  se puede extender hacia otros cuerpos. Hacia el final de la

 personaje es una complicada sinécdoque de las múltiples re-  novela, Susana, al preocuparse por el incidente violento de la

 laciones entre los varios personajes nombrados en la novela.   escuela de su hermano Rodrigo, dice: “Yo siempre he dicho

 Y, como declara el propio ser colectivo, “Yo no soy todos mis   eso de que las personas no terminamos en nosotras mismas”

 miembros sino que soy todos mis miembros y también soy   (303). Es por eso que Susana es el personaje de la novela que

 otra cosa. No hay que incurrir en el misterio de la santísima   más siente responsabilidad por los demás. Es parte de lo que


 trinidad para comprender esto” (212). José Jurado Morales   llama Manuela la “intransigencia” (144) de su hija Susana.






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