Page 55 - Revista6
P. 55

En tanto, buscando puntos de fuga y de referencia alter-  Dentro de ellas, como respuesta a este “síndrome sanita-

 nativos donde hallar un cobijo en el apartarse momentá-  rio” y poniendo en práctica el “higienismo racial” (Gold-

 neamente de este desorden que le agota y no comprende,   berg 336), como técnica constructiva a la vez que defensiva,


 así como un apoyo por el que dejarse guiar una vez que re-  Can Tunis Nou, Avillar Chavorrós, había renacido como

 toma su periplo por las calles del barrio, la cámara alterna   un proyecto experimental y con un propósito no menos ci-

 su confianza entre un Manuel que raramente abandona su   vilizatorio. Como explicaron sus arquitectos, Raimon To-

 casa y un Juan que apenas entra en ella. En el interior de   rres y Jaume Sanmartí, a raíz de que se les otorgara en 1980

 esta vivienda, sin embargo, lo que se encuentra es un Ma-  el premio Opinió del Foment de les Arts Decoratives por


 nuel taciturno y quejumbroso; enredado en sus eternos mo-  su contribución a la erradicación del barraquismo, éstos no

 nólogos y sin establecer un diálogo con las personas que le   solo tuvieron a bien incluir en su plan un centro social, una

 rodean, subordinado al cuidado de sus numerosas hijas in-  escuela y un mercado; sino también talleres para que sus ha-

 cluso estando siempre desocupado, y apesadumbrado por el   bitantes romaníes aprendieran a desempeñar aquellos que


 peso de una soledad crónica que le ahoga a pesar de no estar   se suponían que debían ser sus oficios: la cestería, la elabo-

 nunca solo en un hogar en el que parece no haber espacio   ración de flores artificiales, la recolección de hojalata o el

 para todos, aun cuando su familia está incompleta. Como   flamenco (“Flamenco”). Cinco lustros más tarde, la cámara

 él mismo enumera, faltan aquellos que han pasado a de-  de un proyecto documental que, afectado por una amnesia


 pendencias penitencias, ya sea por la venta de drogas, como   histórica consensuada, se olvida de mencionar los orígenes

 es el caso de su esposa, por su consumo, en el de alguno de   del barrio lo que se encuentra es unas viviendas diseñadas

 sus hijos, o que simplemente han desaparecido de un barrio   no tanto para responder a las necesidades ni al número de

 que se construyó al sur del cementerio de Montjuïc y tras   sus habitantes como para forzar a todos ellos a que se amol-


 unas fronteras no tan geofísicas como bio y necropolíticas   daran a sus dimensiones, “bodies are shaped by histories of

 con las que poder ejercer, en palabras de Achille Mbembe   colonialism” (“los cuerpos son moldeados por historias del

 (Necropolítica 20), un dominio sobre las vidas y un control   colonialismo”; mi trad.) nos recuerda Sarah Ahmed en “A

 sobre las muertes de aquellos que con su presencia pusie-  Phenomenology of Whiteness” evocando a su vez el trabajo


 ran en duda, en los primeros pasos hacia la democracia del   de Frantz Fanon (153), y a un Manuel atrapado entre unas

 país, la identidad racial y el perfil como Estado desarrollado   paredes que habían decidido antes que él dónde no habría

 de una España no solo con perennes aspiraciones europeas,   tenido acceso, qué no habría hecho y en qué se habría con-

 sino también con las enésimas inseguridades de aquel que   vertido; que habían limitado tanto su movilidad como la de


 cree medirse en inferioridad de condiciones con sus vecinos   sus familiares y vecinos condenándolos a todos ellos a la fu-

 del norte.   tilidad hasta hacer de éstos sus rasgos identitarios y que, tras






 54                                                                                                            55
 Revist a  de  al ce s XXI                                            Número  6 , 2024
   50   51   52   53   54   55   56   57   58   59   60