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partir de una estética asociada al extrarradio de la ciudad   que precisa la consideración de un modo industrial de ropa

 española industrial. Sin sumarse a las críticas recibidas por   en una institución dedicada a la moda que evolucionó como

 la cantante por el uso de marcas de identidad de la etnia gi-  tal a partir de presupuestos antropológicos de colección y


 tana, Donovan invita a ver en la acumulación en la ropa y   conservación. “Curating Catalan Cultural Identity through

 accesorios de referentes surgidos en otros ámbitos latinos el   Dress in the Virtual Fashion Museum of Catalonia” descri-

 potencial para provocar discursos sobre clase y debates so-  be en su título la investigación de Nicholas Wolter en cómo

 bre apropiación cultural.   un museo usa la tecnología digital del siglo veintiuno con la

 No deja de ser pertinente señalar en este recorrido cómo   finalidad de diseminar un patrimonio material y simbólico.


 el campo de estudio sobre la moda permite ubicarla en di-  Wolter observa con agudeza cómo la condición maleable de

 versos espacios. El objeto material de estudio puede ser el   los conceptos de identidad catalana encuentra paralelo en

 artefacto de moda, como es el caso de la mantilla y su valor   las oportunidades ofrecidas por lo digital para ofrecer rela-

 simbólico a través del tiempo; lo puede también ser el tex-  tos ajustados a esa evolución dialéctica.


 to visual, fotografía o cartel, que usa la indumentaria como   Hay “más tela que cortar” concluyen Fernández de Alba

 discurso; también un cómic que problematiza el papel libe-  y Garcés para señalar el horizonte de posibilidades de aná-

 rador concedido a la moda y la desplaza como foco de exa-  lisis cultural, sobre todo del ámbito mediático, que ofrece

 men. En el caso de las estrellas populares que dan cuerpo a   la moda como concepto y práctica, en su capacidad para


 la moda, como Conchita Montes o Rosalía, el foco vuelve   establecer nuevos vínculos afectivos. Entre los más recien-

 al vestido como objeto, pero en su rol de intermediario en-  tes está el de promocionar el valor de su creación, a base de

 tre un cuerpo y el producto que ese cuerpo trasmite, pelícu-  popularizar la figura de modistos, reales y de ficción, en el

 la o video musical, más que en sus peculiaridades estéticas   medio televisivo. Fashioning Spain se suma a esa promo-


 como prenda o accesorio.       ción desde otra plataforma que la pequeña pantalla. El libro

 Un acierto más del libro es incluir un apartado dedicado   ofrece en su totalidad una interesante e informadora lectu-

 a los mecanismos que la cultura en su espacio institucional   ra para aquellos interesados, no necesariamente en la moda,

 pone en marcha para dejar constancia material de la con-  pero sí en descifrar más claves de la modernidad en España


 ciencia sobre el vestir y su relación con la identidad, fija y   y su producción fuera de un concepto de la alta cultura, que

 cambiante, de lo nacional: la investigación, la conservación   al igual de la alta costura, se disuelve como único y privile-

 de prendas y la reproducción de imágenes, todo ello llevado   giado espacio para la indagación académica.

 a cabo por los museos. El comisario del Museo del Traje de


 Madrid, Juan Gutiérrez, explica en “El Museo del Traje’s re-  Elena Cueto Asín

 seach on Spanish prêt-à-porter” la evolución metodológica   Bowdoin College






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 Revist a  de  al ce s XXI                              Número  5 , 2021-2023
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