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le obligó a ponerse “un Cobri en la frente para no sentirse   sensuada, al igual que los vecinos de los barrios de su ciudad

 tan desprotegido” (Capel). “Cobri”, doble paródico de Cobi,   cuando la piqueta se llevó por delante las frágiles comunida-

 se convertía de esta manera en un personaje capaz de crear   des de memoria que habitaban vestigios de una utopía so-

 una ficción política colectiva en la que se hacían presentes al   cial urbanística, enterrada ahora bajo el cemento de la Villa

 mismo tiempo la fiesta y el motín, fue expuesto delante del   Olímpica, como puso de manifiesto Vázquez Montalbán:

 Ayuntamiento de Madrid como el sobre más grande que ja-

 más habrían recibido, simbolizando la sombra de la trama   Me gustan las ruinas contemporáneas […] y última-


 de corrupción existente tras el derribo. El híbrido de perro   mente paseo mucho por la ciudad amenazada por la

 pastor y sobre se presentó en sociedad durante las “Olim-  modernidad. En el barrio viejo, muy cerca de aquí, es-

 piadas de la Corrupción” celebradas en el Retiro y organiza-  tán abriendo una vía ancha que se va a llevar los malos
                            olores de la ciudad podrida no sé a dónde, pero se los va
 das por los vecinos del barrio de Tetuán, en cuyo imaginario   a llevar. Y de la Manchester Catalana, de Icaria, poco va

 carnavalesco se incorporaban modalidades deportivas aso-  a quedar […], toda Barcelona sería Icaria, toda la Tierra

 ciadas al boom del ladrillo tales como “corrupción sincroni-  sería Icaria. Nueva Icaria S.A. (Laberinto 96)

 zada, lanzamiento de ladrillo o 100 metros sobre” (Diagonal


 Redacción, “Ofelia”). Si el viejo Cobi había desaparecido de   Si el lenguaje del marketing es el instrumento con el que el

 la mirada de sus conciudadanos mientras se perdía en su as-  capitalismo construye sus expectativas utópicas, los activis-

 censo a los cielos en un barco de papel en 1992 (“barco de   tas entienden la importancia de comunicarse con el ayunta-

 luz” en la ceremonia de clausura de Els Comediants), desva-  miento de la ciudad en su mismo código, desde la parodia

 neciéndose para siempre en el aire de la posmoderna ciudad   de una de las más famosas imágenes del diseño institucional

 ya post-olímpica; el nuevo “Cobri” descendía en una forma   contemporáneo: “Ha llegado el momento de hablarles en

 mucho más sólida, materializado en aquellos sobres llenos   su lenguaje” (Diagonal Redacción, “Cobri”). Lenguaje que

 del dinero con el que se compraron buena parte de los ladri-  produce un agujero en lo simbólico a través del cual irrum-

 llos del boom. Dos décadas después, el diseñador de la mas-  pe aquella afirmación que está en el núcleo duro del imagi-


 cota olímpica, Javier Mariscal, realizaría unas sorprendentes   nario poético y político de la crisis, y que nos recuerda que

 declaraciones sobre el verdadero origen de la mascota, cer-  “el Capital es lo Real en nuestras vidas” (Žižek, Primero 80).

 cano a la tradición underground del cómic contracultural de   Cobi, cuyo origen se remontaba a las experiencias de diseño

 la transición: “Me molestó profundamente que el COOB   de la contracultura transicional utilizadas con fines mercan-

 decidiera que el oficial era desnudo, cuando siempre tenía   tiles  en la socialdemocracia, retornaría en la forma de un
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 que ir vestido; y además el color original era más gitano, no

 tan clarito” (Europa Press). El famoso perro pastor habría


 sufrido un lavado de imagen de cara a su aceptación con-  12  Cuando la mascota hizo su presentación oficial en sociedad, voces
         como la de Vázquez Montalbán reclamaron para ella el potencial sub-





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 Revist a   de   alces   XXI                                  Número  3 , 2016-2017
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