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uno podría caer en el error de pensar que la labor del crí-  identificaré elementos culturales y subjetivos —en la línea

 tico es siempre encontrar instancias en las distintas mani-  de la teoría crítica de la escuela de Frankfurt— pero tam-

 festaciones culturales, en las cuales, a pesar de parecer estar   bién estrictamente económicos o materialistas. De esta for-

 subvirtiendo el orden establecido, al final todo está siempre   ma, a pesar de partir de un acercamiento afirmativo y opti-

 sujeto a la ideología imperante y es imposible salirse de ella.   mista, intento evitar caer en la “doble función consolatoria”

 Al margen de cuán cierta sea esta última afirmación, lo   que Óscar Pereira Zazo recrimina a los cultural studies cuan-

 que está claro es que, a pesar de la importancia de hacer   do dice que tienen una “pretensión de solucionar mágica-


 una crítica que explicite el funcionamiento de la ideología,   mente la pobreza de la esfera política en la sociedad capita-

 también es importante intentar estudiar elementos cultura-  lista” (148) a través de un estudio exclusivamente cultural,

 les que están contribuyendo de manera efectiva a conseguir   y que además poseen una “pasmosa capacidad para liberar

 una mayor justicia social. Considero de suma importancia   a los investigadores de la cultura de su sometimiento a las

 que al menos parte de la crítica adopte esta actitud afirma-  disciplinas académicas relacionadas con las humanidades y

 tiva, no sólo por desarrollar una crítica más optimista —y,   las ciencias sociales” (148).

 sobre todo, productiva— sino también porque es a través   Para todo ello, estudiaré tres bandas concretas: Boikot,


 de ella que podemos apuntar a posibles modelos y estrate-  Ska-p y Reincidentes. El objetivo final de este ensayo, por

 gias culturales efectivos, que pueden ser después adoptados,   tanto, es reflexionar sobre alternativas culturales —en este

 cuestionados, modificados, o mejorados, por otras personas   caso musicales— que sí pueden desarrollarse desde dentro

 en el futuro. Además de esto, es importante subrayar que la   del sistema económico capitalista y, en vez de recrearnos en

 dimensión optimista y afirmativa de la que hablo es radical-  la imposibilidad de escapar la ideología imperante, pensar

 mente opuesta a lo que Herbert Marcuse discute en su ar-  en las posibilidades concretas y efectivas que nos brindan,

 tículo “Acerca del carácter afirmativo de la cultura”. Desde   tanto cultural como económicamente.

 mi posición, no trato de justificar el estoicismo ante lo pre-

 ponderante con actitud afirmativa, sino de, a través de una   Un primer estadio


 crítica afirmativa, rescatar aquello que considero positivo

 de los artefactos culturales que muchas veces son desecha-  Al principio, el punk español estaba preocupado exclusi-

 dos en bloque por estar, supuestamente, demasiado imbui-  vamente por la situación concreta de España. Guiados, en

 dos en ideología.  la mayoría de los casos, por una formación básica de gui-

 En este ensayo, trataré de mostrar cómo un sector del   tarra, bajo, batería y voz, las bandas más reivindicativas de

 punk español ha adoptado un compromiso con las reali-  los años ochenta se centraron en criticar la situación de es-

 dades sociales de Latinoamérica y en qué manera la música   tancamiento en que se encontraba la sociedad española tras


 sí ha servido como herramienta de cooperación. Además,   el fin del franquismo. Para ellos no había cambiado prácti-






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 Revist a   de   alces   XXI                                  Número  3 , 2016-2017
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