Page 209 - Revista3
P. 209

En La soledad, los rasgos característicos de los códigos de la   pación dentro de los límites del mundo de la ficción pero,

 representación realista son usados en combinación con téc-  sobre todo, dentro del mundo histórico.

 nicas del lenguaje cinematográfico más experimentales. De   ¿Qué tipo de efectos articula y qué tipo de participacio-

 entre estas, el uso de la polivisión, esto es, la división del en-  nes pueden reconfigurarse a través de este film por parte

 cuadre en varias particiones, puede ser aquella que cause un   de sus receptores? En primer lugar, es necesario establecer

 mayor efecto sobre el espectador. En primer lugar, porque   que el espectador inserto en la cultura audiovisual postmo-

 Rosales la emplea en cantidad, en concreto, en un treinta   derna concibe la experiencia del visionado de un film de


 por ciento del metraje total del film. En segundo lugar, por-  una manera multiforme y a la que, frecuentemente, acce-

 que no la usa para ilustrar acciones simultáneas en espacios   de a través de diferentes formatos, pantallas o monitores

 distantes, como es costumbre, sino para exponer perspecti-  que, de hecho, complejizan esta experiencia. Según argu-

 vas diferentes de un espacio compartido o de dos espacios   menta Thomas Elsaesser, esta heterogeneidad en las plata-

 próximos. Y por último, porque la utiliza en combinación   formas de acceso promueve asimismo una mayor ductili-

 con cambios de sentido entre las subdivisiones del plano,   dad en sus roles como espectador. Ya hemos señalado varias

 de manera que un personaje puede abandonar la subdivi-  técnicas empleadas por Rosales para producir un efecto de


 sión de la derecha del plano moviéndose de izquierda a de-  extrañamiento que, en suma, contribuye a la conformación

 recha y después entrar en la subdivisión de la izquierda del   de una experiencia de recepción pluridimensional en el es-

 plano moviéndose de derecha a izquierda; tal y como ocu-  pectador. Puesto que, reactivado su espíritu crítico, este es-

 rre, por ejemplo, en el plano 1 del capítulo 1. Esta relativa   pectador está en condiciones de negociar de manera más

 libertad de movimientos de los personajes, constantemen-  fluida los diferentes roles con que puede intervenir en el es-

 te rompiendo las gramáticas convencionales del espacio ci-  pacio representacional de la realidad. En el caso de La sole-

 nematográfico, causa más impacto si cabe en el espectador   dad, tres serían los roles principales a los cuales es invitado

 por cuanto la cámara de Rosales permanece siempre fija con   a participar este espectador: como un observador analítico,

 encuadres muy marcados por líneas verticales y horizonta-  como un participante emocional o como un jugador cóm-


 les. La ruptura de estos límites y la producción de nuevas   plice con los mecanismos auto-reflexivos del cineasta.

 interconexiones dentro del plano permite asimismo la pro-  En lo que resta, en base a un análisis detallado de las estra-

 yección de intervenciones y participaciones creativas en el   tegias empleadas por Rosales en tres secuencias diferentes,

 espacio fuera de plano. De manera que, mediante esta ex-  este ensayo presenta una argumentación sobre los variados

 perimentación formal, el cine de Rosales desfamiliariza la   tipos de roles a los que los receptores de este film son lla-

 experiencia de la recepción de sus espectadores con esa co-  mados a participar. Para ilustrar, en primer lugar, en aque-

 tidianeidad de las situaciones diarias representadas por el   llos espacios que abren el film y donde se invita a la partici-


 film; y haciéndolo, reactiva su grado de atención y partici-  pación del espectador favoreciendo su conexión emocional






 208                                                                                                          209
 Revist a   de   alces   XXI                                  Número  3 , 2016-2017
   204   205   206   207   208   209   210   211   212   213   214