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tudiantes y abrió diálogos sobre la relación entre la natura-
leza y la cultura, el extractivismo, la defensa del medio am-
biente y la interpretación de esos temas dentro de un aula
informada por la ecopedagogía.
Les asigné La lucha por el bosque de Chico Mendes en el
primer tercio del semestre. La lucha por el bosque es un tes-
timonio poderoso donde Mendes cuenta la historia de su
vida y activismo en la Amazonía brasileña. Su trabajo am-
biental surgió en un contexto de la brutal dictadura militar
brasileña de 1964-1985 que impulsó el desarrollo económi-
co de la Amazonía, lo que provocó una deforestación ma-
siva y el establecimiento de grandes extensiones de granjas
comerciales de monocultivo. Mendes detalla su estrategia
de organización colectiva basada en el empate o barricada,
donde los recolectores de caucho y sus aliados bloqueaban
físicamente las excavadoras o los deforestadores. Agrupé el
testimonio de Mendes con una lectura sobre la historia del
caucho en la Amazonía. Mientras los estudiantes leían los
antecedentes históricos de la explotación y la violencia ha-
cia los pueblos indígenas y los trabajadores del caucho, tam-
bién vieron el relato de Mendes sobre la organización y ac-
ción colectiva, que, al final, cambió el curso de la historia.
Los estudiantes notaron cómo Mendes movilizó su comu-
nidad y la atención internacional para abordar el sistema de
servidumbre por deudas que los caucheros amazónicos es-
taban experimentando en las muchas décadas desde el pri-
mer auge del caucho amazónico (1875-1912). El relato de
Mendes en sus propias palabras mostró a los estudiantes el
proceso, pero también la posibilidad de una acción colec-
tiva de base y el cambio posterior. De la historia de vida de
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Revist a de al ce s XXI
Mendes también aprendieron sobre el peligro que enfrenta-
ban los activistas, y aún enfrentan hoy.
En clase hablamos sobre la creación de “reservas extrac-
tivas”, uno de los métodos por los cuales Mendes propuso
proteger el medio ambiente y los pueblos amazónicos. Las
reservas extractivas, en términos generales, son áreas desig-
nadas de propiedad estatal donde el uso de la tierra, el acce-
so y los derechos se otorgan a los lugareños principalmente
para la subsistencia y el comercio a pequeña escala. El esta-
blecimiento de reservas extractivas fue liderado por recolec-
tores de caucho (principalmente Mendes) en el estado ama-
zónico de Acre a partir de la década de 1970. En una reserva
extractiva, la tierra es administrada comunalmente y las co-
munidades pueden practicar la agricultura de subsistencia,
así como algunas prácticas extractivas como la pesca, la re-
colección de caucho o la recolección de nueces. En última
instancia, dentro de las reservas, la gente practica un tipo
de sustento sostenible centrado en los bosques (Hochstetler
y Keck; Hecht). Mendes abogó por las reservas extractivas
para dar agencia y derechos sobre la tierra a los recolectores
de caucho y para desbaratar un sistema de servidumbre por
deudas, un legado del auge del caucho. Involucró a comu-
nidades que ya participaban en prácticas ambientales sos-
tenibles y presentó reservas para evitar la deforestación y la
degradación ambiental a medida que los grandes terrate-
nientes continuaban recurriendo a plantaciones de mono-
cultivos rentables. En los últimos cuarenta años, se han es-
tablecido reservas extractivas en todo Brasil, principalmente
en áreas estratégicas para protegerse del llamado arco de de-
forestación: una curva en el borde sureste de la selva donde
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Número 7 , 2025