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Cinta Tort Cartró/Zinteta (1995–). Estas artistas priorizan   millones de trabajadoras participaron en la paralización del

 el cuerpo de mujer como un territorio interseccional sobre   país —la de la actividad laboral, de los cuidados y del con-

 el cual se expresan la protesta y el diálogo. Yolanda Domín-  sumo— para reivindicar una sociedad libre de opresiones,


 guez llevó a cabo “No sólo soy un cuerpo” (2014) en una   de explotación y de violencia machista. La tercera movili-

 playa de Florida donde voluntarios pasearon exhibiendo el   zación era el hashtag #Cuéntalo que la periodista Cristina

 mensaje “I am not just a body”. Pilar Albarracín presentó   Fallarás puso en marcha cuando, el 26 de abril de 2018, se

 una serie de fotos titulada “Carne y tiempo” (2018) en la   conoció el veredicto del caso de La Manada (cinco hombres

 cual se veía el cuerpo de la artista amarrado con cuerdas y,   acusados de violar en grupo a una joven de dieciocho años


 suspendido del techo, envuelto en mantón de manila o traje   en los Sanfermines de 2016). Este capítulo complementa el

 de faralaes con el fin de promover una relectura de la cultu-  anterior porque, como hizo Ana María Díaz-Marcos, habla

 ra andaluza y española. La artista Raquel Riba Rossy, cono-  sobre Yolanda Domínguez, a quien se puede ver en el docu-

 cida por su personaje Lola Vendetta, representa experien-  mental Yo decido.


 cias cotidianas de la mujer, incluyendo la menstruación, en   Ana Corbalán Vélez, coeditora de esta antología, explora

 las redes sociales y también en sus libros Lola Vendetta: más   en el tercer capítulo la desigualdad que permanece a pesar

 vale Lola que mal acompañada (2017) y ¿Qué pacha, mama?   de la Ley Orgánica 3/2007 para la Igualdad, “Insumisas: ac-

 (2018). Cinta Tort Cartró/Zinteta también celebra el cuer-  tivismo femenino por la igualdad de género”. Indaga en al-


 po natural de la mujer para desmitificar la menstruación a   gunas de las actividades realizadas por el Club de Malasma-

 través de fotografías de su propia sangre que pone en Insta-  dres, +Mujeres, CIMA (Asociación de Mujeres Cineastas y

 gram. El lector/la lectora puede observar que las artistas na-  de Medios Audiovisuales, MIM (Mujeres en la Industria de

 cidas en los 90 son aún más atrevidas y logran sacar a la luz   la Música), Clásicas y Modernas (Asociación para la Igual-


 temas tabú que la sociedad ha silenciado durante siglos.  dad de Género en la Cultura) y los equipos de televisión y

 María Camí-Vela explora en el segundo capítulo, “Espa-  prensa en España. El Club de Malasmadres fue fundado en

 ña: ¿epicentro de la cuarta ola feminista?”, el feminismo re-  octubre de 2013, y ha sido un fenómeno de Internet nacio-

 ciente español y destaca varias movilizaciones. La primera   nal; critica, entre varios temas, la cuestión del trabajo invi-


 era la marcha del 1 de febrero de 2014, de la cual se hizo Yo   sible. Es muy interesante que Corbalán Vélez destaque la

 decido. El tren de la libertad (2014) que documenta miles de   asociación murciana +Mujeres porque Murcia es una de las

 personas de varias ciudades españolas y europeas que se re-  comunidades autónomas más conservadoras del país. Ade-

 unieron en Madrid. Otra marcha significante era la huelga   más de su plataforma virtual, +Mujeres tiene una columna


 feminista del 8 de marzo de 2018 —la primera huelga gene-  en el periódico La Opinión, y en 2018 se unió a otra vein-

 ral sólo de mujeres del Estado español— en la que casi seis   tena de agrupaciones para fundar la Asamblea Feminista de






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 Revist a   de   alces XXI                                    Número  4 , 2019-2020
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