Page 395 - Revista4
P. 395
en el título del volumen— se exploran a través de veinte universal, mientras lo femenino pertenece a un ámbito mi-
entrevistas llevadas a cabo entre 2013 y 2017, con desta- noritario. Dicha idea, avalada por una educación androcén-
cadas protagonistas de la escena literaria española: Marta trica que crea no solo un canon sino, sobre todo, un gusto
Sanz, Laura Freixas, Natalia Carrero, Blanca Riestra, Mer- marcado por patrones misóginos, emerge en las prácticas de
cedes Cebrián, Cristina Fallarás, Elvira Navarro, Gabriela lectura de escritores y críticos literarios ya que, como señala
Wiener, Lara Moreno, Cristina Grande, Luisa Castro, Re- Touton, “muchos protagonistas del campo literario pueden
medios Zafra, Najat El Hachmi, Sara Mesa, Karmele Jaio, defender un discurso progresista, a veces radical, teórica-
Paloma Díaz-Mas, Cristina Morales, Juana Salabert, Patri- mente igualitario entre hombres y mujeres, y a la vez ejercer
cia Esteban y Luisa Miñana. En estos diálogos, divididos o sufrir esta discriminación, siendo partícipes de un sistema
en cuatro apartados titulados “Voces inconformes (frente al de dominación masculina” (26). Si estas prácticas refuerzan
paternalismo, al ninguneo y al mito de la belleza)”, “Escri- el predominio cultural y simbólico masculino, algo parece
toras insurrectas y vidas precarias”, “Pensar, crear y publi- estar cambiando en el mundo editorial, como afirma Lara
car desde la periferia o la subalternidad” y “De tradiciones, Moreno, la cual, en su entrevista, resalta el gran número de
genealogías y experimentos estéticos” afloran las vivencias mujeres que ocupan puestos de responsabilidad en edito-
personales, así como las tensiones que atraviesan tanto la riales prestigiosas como Alfaguara, Anagrama o Seix Barral
sociedad española como la industria cultural. De esta ma- (180). Debido a este cambio en la dirección de importantes
nera, emergen los mecanismos invisibles e insidiosos que sellos editoriales y, en particular, gracias a la influencia de
causan una serie de prácticas discriminatorias que van in los feminismos y las movilizaciones sociales, Touton cierra
crescendo desde la invisibilización a la minusvaloración, si- su introducción con una nota esperanzadora en cuanto al
lenciamiento, desacreditación y desprestigio de las obras de futuro de las letras españolas (72).
autoría femenina. Su optimismo, sin embargo, no siempre se refleja en las
Como ya está evidenciado en la introducción, las entre- opiniones de las entrevistadas, como se pone en evidencia
vistas muestran las paradojas de un sector cultural atrapa- en la parte central del libro, donde las escritoras toman la
do en una situación contradictoria en cuanto a que, por palabra para relatar su proceso de concienciación en cuan-
un lado, el público lector está compuesto mayoritariamente to al tratamiento diferencial que el ámbito literario reser-
por mujeres y, por otro, los críticos literarios varones tien- va a las escritoras en diversos momentos de sus carreras. En
den a ignorar las aportaciones de las escritoras, ya que sim- este sentido, cada una ofrece su diagnóstico que oscila entre
ple y sencillamente no las leen. Esta paradoja, denunciada un cauto optimismo a una más aguda crítica de los meca-
por autoras, académicas y ensayistas, se sustenta sobre una nismos discriminatorios puestos en acción por la industria
falacia discursiva, según la cual lo masculino coincide con lo editorial y cultural (31). La variedad de posturas refleja, en
394 395
Revist a de alces XXI Número 4 , 2019-2020