Page 88 - Revista1
P. 88

zan sólo sobre la base de un funcionamiento y unas normas                                                               we call ‘democratic capitalism’” (“la transformación gradual

         inherentes.  Como afirma Moishe Postpone, “rather than                                                                  de esa formación social que llamamos ‘capitalismo demo-
                            6
         regarding  the  current  global  crisis  as  contingent  or  with                                                       crático’”; Streeck, “Crisis” 5) y en b) “[the removal of] legal

         reference to recent neoliberal developments alone, [many                                                                barriers to financial dynamics that had already gathered de-

         authors] regard it as the culmination of the global develop-                                                            cisive momentums within the old regulation” (“[la elimina-

         ment since the 1970s” (“más que considerar la crisis actual                                                             ción] de las barreras legales a las dinámicas financieras que

         como contingente y relacionada con el desarrollo reciente                                                               habían ya logrado un sustancial empuje en el contexto de la


         del neoliberalismo, [muchos autores] la consideran como la                                                              antigua regulación”; Panitch y Kokings 69). En conclusión,

         culminación de una evolución global iniciada en los años                                                                sin atender a los factores estructurales en cuyo perímetro el

         70”; 228). A lo que añade: “the systemic dimension of such                                                              capitalismo intenta salir de sus propios atolladeros, se incu-

         developments implies a system of constraints and impera-                                                                rre con facilidad en propuestas salvíficas que interpelan al

         tives” (“la dimension sistémica de tales desarrollos implica                                                            capitalismo para pedirle lo que éste no tiene. Soñar con un

         toda una estructura de constreñimientos e imposiciones”;                                                                capitalismo compasivo (como sucede cada vez que se aña-

         229). Este modelo de análisis debería inocularnos contra el                                                             de “compasivo” a cualquier sustantivo político) implica una


         intento de explicación “in contingent and agentive terms                                                                suerte de delirio fabulístico.

         [that] can result in a personalization of historical develop-                                                               Este acercamiento a la crisis implica además una revisión

         ments, which, in turn, can shade off into various conspir-                                                              crítica del formalismo engendrado en un post-estructuralis-

         acy theories” (“en términos contingentes o negativos que                                                                mo de segunda y tercera generación. Éste, como si se tratase

         pueden resultar en una personalización de los procesos his-                                                             de una cuestión de principios epistemológicos y luego po-

         tóricos que, a su vez, son susceptibles de derivar en diver-                                                            líticos, fetichiza los tropos de la fragmentariedad y la dife-

         sas teorías conspiratorias”; 229). Para evitar la vergonzante                                                           rencia mientras estigmatiza conceptos, previamente troca-

         especulación paranoica, no hace falta negar el papel activo                                                             dos en hombres de paja, como el esencialismo o las grandes

         del sujeto sino enmarcar dicho papel en a) “the ongoing, in-                                                            narrativas. No sin cierta razón Rosalind O’Hanlon y David


         herently conflictual transformation of the social formation                                                             Washbrook aseveran que, bajo el manto protector de un su-

                                                                                                                                 puesto radicalismo subversivo (que nos salva de prejuicios

         6  A esto se refieren, por citar tan sólo algunos nombres, Immanuel Wa-                                                 metafísicos, ataduras totalizantes y cándidas certidumbres
         llerstein y David Harvey. El primero describe, por ejemplo, los ciclos                                                  cognoscitivas), encontramos una corriente política neo-con-
         progresivos de competitividad que provocan bajadas de precios y des-

         censos de beneficio, que a continuación son seguidos de ciclos de con-                                                  servadora que privilegia “methodological individualism, the

         tracción e inestabilidad (134). David Harvey ha revisado espacio-tem-                                                   depoliticizing insulation of social from material domains, a
         poralmente estos ciclos para proponer su conocido concepto de “uneven                                                   view of social relations that is in practice extremely volun-
         geographical development” (“desarrollo geográfico desigual”; “Neolibe-                                                  taristic, [and] the refusal of any kind of programmatic pol-

         ralism” 26).





       88                                                                                                                                                                                                                              89
                Revist a   de   alces   XXI                                                                                                                                                       Número  1 , 2013
   83   84   85   86   87   88   89   90   91   92   93