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Huei rechaza cualquier situación que lo vincule a su histo-  el consumismo desaforado y en un ocio alienante. La droga

 ria. Se quiere salir de su propia historia.  de los 80 tuvo un sentido reivindicativo. La gente reaccio-

         naba contra algo, de una manera muy destructiva, sí, pero

 JB: Acerca de lo que mencionaste antes de que la historia   era una reacción. La gente que consumía droga en los 90 lo

 tenía reflejos de tu propia biografía, también es curioso el   hacía por nihilismo. La novela Historias del Kronen, de Ma-

 paralelo entre las dos historias: Clara, la niña española con   ñas, refleja muy bien el nihilismo de esa época. Parece que

 una familia tan distinta a la de Chi-Huie, parece tener una   me estoy yendo muy lejos de mis libros, pero en realidad


 sensación parecida de desarraigo con ese entorno familiar.   no es así. A mí me sale una niña que vive en una ciudad de

 En su caso, ¿de dónde viene esa inconformidad? ¿Qué re-  los 80 pero que de alguna manera presiente los 90. Enton-

 presenta el vagabundo que le atrae?  ces se me ocurrió meter a un vagabundo que transitara por

         las partes prohibidas de la ciudad y que viviera al margen.

 EN: De niña yo vivía en Valencia y siempre me fijaba mu-  Es un vagabundo muy poco realista, sí, pero me servía para

 cho en la ciudad. Por aquella época no había tanta histeria   que iniciara un diálogo con la niña. Para que ésta viera que

 con la protección de la infancia, y los niños jugábamos en   hay una posibilidad real de vivir al margen. Ahora bien, esa


 la calle. Me gustaba internarme por sitios prohibidos. Era   posibilidad es engañosa, porque la marginalidad le destru-

 como cualquier niña a la que le dices que no vaya al enchu-  ye. En el sistema capitalista, o tienes dinero, o no puedes

 fe y va al enchufe. Guardo recuerdos muy poderosos de la   construir una vida. El vagabundo tiene razón, pero no exis-

 Valencia de los 80 y de los 90. En los 80 había mucha droga   te para él la posibilidad real de llevar a cabo lo que dice. En-

 y una continua amenaza de que iban a atracarte e incluso a   tonces la niña entra en ese juego. Es su manera de explorar

 drogarte o algo peor. El centro de la ciudad se caía a pedazos   lo que sus padres le vedan.

 y estaba lleno de yonquis. Había otro centro más burgués, y

 junto a ese centro más burgués estaba el casco histórico, que   JB: Has escrito una novela nueva, ¿no? ¿Cuándo saldrá?

 era intransitable. Todo ello hacía que la ciudad fuera muy


 amenazante y oscura. Esa amenaza y esa oscuridad, duran-  EN: He terminado un libro que saldrá en enero de 2014 en

 te el tiempo en que yo fui niña, tuvo para mí el valor de ese   Mondadori. El libro está relacionado con lo que he dicho

 enchufe en el que tus padres te dicen que no metas los de-  antes de que llevo mucho tiempo notando la crisis. Cuan-

 dos. Quieres descubrir lo prohibido. Luego vienen los 90, la   do terminé la carrera, me encontré con que no había apenas

 ciudad se remoza, los yonquis ya han muerto de sobredosis   posibilidades laborales para alguien de letras que no se qui-

 o de sida. Es la época del pelotazo, de los nuevos ricos, del   siera sacar una oposición. Entre 2003 y 2004 busqué traba-

 escepticismo. Todas esas promesas de que España iba a ser   jo desesperadamente y no lo conseguí. Esa situación generó


 un país mejor se traducen en hacer dinero muy rápido, en   un texto que titulé “La trabajadora”. Escribí 20 páginas y






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 Revist a   de   alces   XXI                                              Número  1 , 2013
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