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to y abandono de los principios que compartieron. La no-
vela contiene en su última página la cita exacta “Pero no
hay fortaleza inexpugnable ni prisión que no contenga un
defecto” (Soriano 174), en lo que entendemos supone una
nota de esperanza en esa lectura pesimista de un período de
derrota de los ideales. Creemos que se trata de un homenaje
a la autora y un modo de retomar su testigo y recuperar la
vigencia de su discurso veintidós años más tarde, pero para
proponer la lectura contraria: las posibilidades de una ac-
ción social revolucionaria.
También conviene recordar la cita de Adrienne Rich, poe-
ta norteamericana, feminista militante, con la que empieza
la novela. Se trata de unos versos pertenecientes a su poema,
“Recursos naturales”:
Debo echar mi suerte con quienes,
siglo tras siglo, con astucia,
sin poder extraordinario alguno,
rehacen el mundo.
Versos muy elocuentes sobre la capacidad de transforma-
ción social que los seres corrientes, el “ciudadano medio”,
anónimos, como el abogado que protagoniza la historia,
pueden tener.
Además, la elección de Adrienne Rich resulta significati-
va también por tratarse de una figura reconocida en el mo-
vimiento feminista, lo cual señala el enfoque de algunos te-
mas de la novela: la violencia de género, la marginación de
la mujer en el poder político, la manipulación del discurso
feminista…En la novela aparecen hasta cuatro mujeres que
son víctimas de abusos: la hermana de Crisma le pide dinero
porque su exnovio la ha arruinado, la “vikinga” ha escapado
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Revist a de alces XXI
de un maltratador, Carmen traiciona a Julia Montes porque
su actual compañero ha sido denunciado por una expare-
ja, Amaya es acosada por un compañero que llega a inten-
tar matarla. La vicepresidenta es destituida sin que haya lle-
vado a cabo su proyecto político, siendo el único personaje
del gobierno a la que le preocupa su coherencia ideológica.
Además el presidente “sacrifica” su famoso ministerio de la
Igualdad, del mismo modo que destituye a la vicepresiden-
ta, a pesar de que es conocido que el correlato real del pre-
sidente se preció en su momento de instituir la paridad de
género en el gobierno. No parece que el sistema propicie la
defensa de los derechos de las mujeres, por más que, des-
de el poder, se tomaran medidas que, recuerda la vicepresi-
denta, no dejan de ser simbólicas, “aderezos”. Se entiende
así el deseo de transformación en bruja, en Margarita, que
impregna el discurso íntimo de Julia Montes. La militancia
feminista de la vicepresidenta y el sentido íntimo de su de-
rrota se muestra al recoger sus objetos personales del despa-
cho, cuando es destituida. Entre ellos hay
un retrato de Condorcet que ella misma había llevado a enmar-
car, y en donde había copiado la siguiente frase: “Las mujeres
tienen los mismos derechos que los hombres; tienen, pues, el de
disponer de las mismas oportunidades para adquirir las luces”
(Gopegui, Acceso 298).
2. Perspectivismo narrativo
Para evidenciar de qué manera las estrategias narrativas em-
pleadas fomentan el perspectivismo, deberemos partir de
“la diferencia fundamental entre los hechos en su sucesión
cronológica y lógica —la historia o trama— por un lado,
y por otro la presentación de los mismos hechos en la na-
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Número 1 , 2013