Page 120 - Revista1
P. 120

nineteenth century and first half of the twentieth; ascend-                                                             rio sobre varios textos de Lenin, el pensador esloveno con-

         ing from a position of political marginality and weakness                                                               cluye lo siguiente: “a revolutionary process is not a gradual

         as of, say, 1870, to one of political centrality and consider-                                                          process but a repetitive movement, a movement of repeat-

         able strength around 1950” (“[que] emerge lenta y laborio-                                                              ing the beginning, again and again” (“un proceso revolucio-

         samente a lo largo y ancho del sistema-mundo, fundamen-                                                                 nario no es un proceso gradual sino un movimiento repe-

         talmente durante el último tercio del siglo XIX y la primera                                                            titivo, un movimiento que consiste en repetir el comienzo

         mitad del siglo XX; una izquierda que asciende de una posi-                                                             mismo una y otra vez”; “How” 45). No se trata, por consi-


         ción de marginalidad y debilidad políticas en torno a 1870                                                              guiente, de certificar lo logrado o fortificar lo obtenido, sino

         (por citar una fecha) a una de centralidad y considerable                                                               de volver al principio, empezar sin atajos, sin falsos arran-

         fuerza política alrededor de 1950”; 135). Esta izquierda se                                                             ques in media res. La utilidad de esta intuición es inestima-

         encalla definitivamente en el vuelco neoliberal de los 70,                                                              ble, pero en el discurso de Žižek se vuelve contradictoria ya

         la caída del bloque soviético, la añeja de-marxificación de                                                             que sirve para preconizar, tras el désastre obscur de 1989, la

         partidos, sindicatos y círculos intelectuales, “[and] the turn                                                          posibilidad y las condiciones reales de una nueva reacción

         towards a more open-market socialism and ideas of ‘euro-                                                                revolucionaria (“How” 53-55).


         communism’ in Italy and Spain” (“[y] el giro hacia un so-                                                                   Esta faceta de la argumentación de Žižek no es, en este

         cialismo de mercado abierto y hacia ideas de “eurocomunis-                                                              momento, válida para el análisis de la situación española y

         mo” en Italia y España”; Harvey, Spaces 14).                                                                            europea, y puede además producir impotencia y desengaño.

             Por lo tanto, la gran pregunta que tenemos que gestionar                                                            ¿Cómo se puede justificar esta afirmación? Creo que sólo

         es cómo mantener la tensión entre dos principios no anta-                                                               hace falta observar el desarrollo de ciertos acontecimien-

         gónicos pero sí heterogéneos: por una parte, la necesidad                                                               tos durante el otoño de 2012 (el trimestre en el que ex-

         de un radicalismo anti-capitalista sin fisuras ni compromi-                                                             plotan varios conflictos sociales y políticos). No cabe duda


         sos; por otra, el reconocimiento, igualmente firme, de es-                                                              de que en España, desde septiembre a diciembre de 2012,

         tar atravesando un tiempo de resaca post-revolucionaria en                                                              junto a la huelga general del 14 de noviembre, se multi-

         la no se otea en el horizonte peninsular y europeo tentati-                                                             plican las manifestaciones, las protestas, los actos reivindi-

         va alguna de ruptura con un sistema político-económico                                                                  cativos y los gestos alternativos de disidencia. En idéntica

         de carácter global, en fase de reafianzamiento. En realidad,                                                            proporción, se reproducen los grupos que organizan y par-

         esta tensión podría ser compendiada en un axioma bastante                                                               ticipan en dichos actos y gestos. Uno de los más reveladores

         sencillo: extremar la crítica anti-capitalista cuando se puede                                                          es la impresionante manifestación con que concluye la jor-

         hacer poco contra el capitalismo. Con su habitual astucia,                                                              nada del 14-N. Además de su tamaño y contagiosa energía,

         Žižek explica cómo gestionar esta contradicción sin anular                                                              llama la atención el sinfín de organizaciones participantes:


         ninguno de sus dos términos. En un apasionante comenta-                                                                 partidos políticos nacionales (fundamentalmente Izquierda






      120                                                                                                                                                                                                                             121
                Revist a   de   alces   XXI                                                                                                                                                       Número  1 , 2013
   115   116   117   118   119   120   121   122   123   124   125