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nas (escritor, Popayán [Colombia] 1978), Miguel Espigado las estéticas contemporáneas; la internet y el concepto de
(crítico literario, Salamanca 1981), Jordi Carrión (escritor, autor, público y crítica; la narrativa contemporánea; y fi-
Tarragona 1976), Jordi Gracia (catedrático de literatura/en- nalmente, la actualidad de la novela política. A partir de es-
sayista, Barcelona 1965), Ricardo Menéndez Salmón (es- tos temas concretos, los protagonistas de los diálogos abren
critor, Gijón 1971) y Damián Tabarovsky (escritor/editor, sus intervenciones a múltiples subtemas culturales actuales,
Buenos Aires 1967). De los 17 participantes, 14 son es- entre los que sobresalen de manera reiterada a lo largo de
pañoles con una amplia mayoría de catalanes, dos son ar- las conversaciones: el cambio introducido por la tecnología
gentinos y uno es colombiano. Las edades oscilan entre los en una clásica organización del mundo (¿quién es el autor?,
81 años de Gubern y los 34 de Espigado, aunque la me- ¿quién es el crítico?, ¿dónde se publica?, ¿quién lee?); la ubi-
dia de los nacimientos se encuentra entre los años 1965 y cuidad del mercado ‘por encima’ de la creación artística y
1975. El volumen aparece introducido por un extenso en- la posibilidad/imposibilidad de salirse del mismo; la auto-
sayo de Isabelle Touton titulado “De subjetividades creado- ficción y las narraciones del yo (subjetividad) en un sentido
ras y legitimadoras: elementos de análisis para el campo de amplio; la supremacía de la forma sobre el contenido o vi-
las narrativas españolas (siglo XXI)” (11-61). Además Tou- ceversa en la cultura del momento; el concepto de que vivi-
ton desarrolla los materiales complementarios que aparecen mos en una cultura post- (entre otras, postfotográfica, post-
al final del libro a manera de anexo (285-331). naturaleza, postpop, postindependiente).
La idea para los diálogos surge de una conversación entre De la conversación entre Fontcuberta y Pron se puede re-
José Luis Pardo y Eloy Fernández Porta llevada a cabo en saltar la necesidad de una pedagogía de la imagen así como
el 2010 y publicada en Quimera en el verano de ese mismo de una conciencia crítica ante la abundancia de imágenes
año. Después de tres años de trabajo, en 2013, se comple- que circulan diariamente en los medios de comunicación,
tan el resto de las conversaciones. Todas las conversaciones en internet, en la televisión y en los teléfonos móviles. Di-
se inician con una reflexión-pregunta realizada por Valen- cha abundancia para Fontcuberta hace que el lenguaje de
cia y a partir de aquí las parejas exponen sus ideas y opinio- las imágenes sea más cercano y asequible para el individuo,
nes con pequeñas intervenciones de Valencia para resumir, al mismo tiempo que alerta de la necesidad de que “las imá-
ordenar y/o redirigir el diálogo (una de las conversaciones genes no se transformen en productos de seducción y con-
tiene tres participantes [Calvo, Costa y Fernández Mallo]). sumo, sino que puedan todavía comportar una dimensión
Los temas de diálogo que propone Valencia son temas am- crítica y una conciencia política” (79).
plios pero básicos para entender el momento cultural de la Esta misma sobreabundancia de imágenes y su relación
España contemporánea: la veracidad de la imagen digital; con la verdad es mencionada por Gubern en su diálogo
la intervención del poder para establecer la realidad; la poé- con Quintana: “Lo que ocurre es que la guerrilla audiovi-
tica narrativa actual; la borradura entre alta y baja cultura; sual de los teléfonos móviles, cámaras alternativas, intrusos,
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Revist a de alces XXI Número 3 , 2016-2017