Page 62 - Revista2
P. 62

entrelazados de acumulación, uso y desperdicio sobre los                                                                el archivo online “Así ven la huelga de limpieza los lectores”

         que ha sido construido el sistema en el que existen (y exis-                                                            se sugieren potencialidades más constructivas y éticas de la

         timos), y que (nos) facilitan estos trabajadores mediante su                                                            basura. El estudio de estas fotografías de los desperdicios es

         labor estética. Recordando el tercer epígrafe al comienzo de                                                            valioso porque, re-enmarcados por una lente y una estética,

         este ensayo, en este sentido deberíamos recordar que los ba-                                                            estos objetos-basura se reafirman, derrocando nuestras ex-

         sureros son los héroes olvidados de la modernidad.                                                                      pectativas convencionales, así forzando un desplazamiento

             Lo que vemos en las imágenes documentales analizadas                                                                fundamental de nuestra experiencia de la materialidad del


         en este ensayo es una prueba incontrovertible del poder na-                                                             mundo (Hawkins citada en Bozak 118).                                   12

         rrativo, simbólico y político de la basura dentro del ámbito

         urbano. Si las industrias de la imagen y sus representantes

         valoran Madrid como tabula rasa para la fabricación de na-

         rrativas visuales nacionales e internacionales (“Madrid está

         muy preparada para grabar”, Comes Fayos), las fotografías

         de la Huelga del 2013 demuestran el potencial de la ciudad


         y de sus habitantes de crear sus propias narrativas vernácu-

         las alternativas utilizando una gran gama de estrategias ex-

         presivas.

             El interés principal de la basura reside en la inestabilidad

         y variabilidad histórica de sus valores como cosa y como

         símbolo: existe, tal y como vimos en Madrid en noviembre

         del 2013, como un problema físico y económico que resol-

         ver, pero también la basura lleva consigo unos valores epis-

         temológicos, estéticos y narrativos que revelan mucho sobre


         lo que nos importa realmente como cultura. Si, tal y como

         afirma Néstor García Canclini, “el consumo sirve para pen-

         sar” (41-55), la basura nos obliga a hacer otros tipos de pre-                                                          12
                                                                                                                                    Junto con la fotografía, el cine también proporciona perspectivas nue-
         guntas: ¿Qué tipo de pensamiento se puede elaborar con lo                                                               vas sobre las dinámicas normalmente invisibles de la producción y dese-

         que queda después del consumo? ¿Qué se puede hacer con el                                                               cho de basura. En su Theory of Film (1960), Siegfried Kracauer apunta

         lado feo de la cultura? ¿Qué ocurre cuando la ciudad post-                                                              la capacidad de las películas de revelar cosas que normalmente se quedan

         moderna se convierte en puesta en escena para la basuriza-                                                              fuera de nuestro campo de visión, los restos en particular (54), y cómo


         ción del mundo? En varias de las fotografías recopiladas en                                                             esas funciones reveladoras constituyen uno de los aspectos determinan-
                                                                                                                                 tes del cine como medio de comunicación.





       62                                                                                                                                                                                                                              63
                Revist a   de   alces   XXI                                                                                                                                           Número  2 , 2014-2015
   57   58   59   60   61   62   63   64   65   66   67