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tal. Se observará la visibilidad y connotación que adquieren   Estos discursos se enmarcan en el postfeminismo  y se re-
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 las diferentes etapas del proceso reproductivo y si se aborda   produjeron en diversos productos culturales en los que se

 críticamente el contexto social actual y los retos que plantea   promovía una imagen de la mujer independiente, respon-


 la maternidad.   sable y empoderada, aunque representada siempre dentro

 Desde los años setenta del siglo pasado los estudios sobre   del contexto de una sociedad patriarcal y neoconservadora.
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 la representación de la mujer en la ficción audiovisual han   Estos discursos propagaron unos estándares de perfección

 devenido un tema fundamental de investigación en nume-  irrealizables que suponían una clara contradicción cultural

 rosas disciplinas. En cambio, han sido menores aquellos   ya que, por una parte, se instaba a las madres a dar con ab-


 análisis centrados específicamente en la representación de   negación su tiempo, dinero y amor a los niños y, al mismo

 la maternidad en la cultura popular, aunque en los últimos   tiempo, se las impulsaba a ser individualistas y ambiciosa-

 años se ha percibido un aumento de estos tanto a nivel in-  mente competitivas en el trabajo.

 ternacional como nacional.  En la actualidad, algunas ficciones empiezan a desmon-


 La figura materna ha tendido a representarse en la ficción   tar este rol, mostrando la frustración o los cambios vitales

 como dos polos opuestos: la madre sacrificada, el ángel del   que implica centrarse en exclusiva en la crianza de los hi-

 hogar descrito por Mary Nash en Mujeres en el mundo: his-  jos, dejando de representar a las madres como “superwom-

 toria, retos y movimientos (2004); o bien la madre monstruo-  en” y haciéndolo más como “good enough mothers” (Feasey


 sa y castradora por Barbara Creed en The Monstrous-Femi-  10),  un término que define a aquellas mujeres que quieren
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 nine: Film, Feminism, Psychoanalysis (1993), incorporando   ser buenas madres, pero luchan con una serie de problemas

 en cada época histórica diferentes matices según las preo-  emocionales, logísticos y financieros que muestran la crian-

 cupaciones y miedos de la sociedad del momento. A finales   za de una forma más realista.


 del siglo XX se impuso la consagración del ideal de la ma-

 ternidad intensiva descrito por Sharon Hays en el libro Las

 construcciones culturales de la maternidad (1998), según el   3  McRobbie se refiere con este término al discurso establecido desde la

 cual la madre era la única responsable del desarrollo emo-  cultura popular en la década de los 90s, según el cual el feminismo ya


 cional, espiritual, intelectual y físico de la familia. Poco des-  había conseguido grandes logros. Con esta premisa, algunas representa-
         ciones usaron la libertad para elegir de las mujeres para mostrar patrones
 pués, Susan Douglas y Meredith Michaels acuñaron en The   de comportamiento conservadores.

 Mommy Myth el término “new momism” para definir los   4  Véanse Gill, Jarava y Plaza.

 estándares de éxito difícilmente alcanzables y ampliamente


 difundidos por los medios de comunicación.  5  Este término fue primero descrito por el pediatra Donald Winnicot en
         la década de los 70s para defender el criterio materno ante la creciente

         intrusión de profesionales en la crianza de los hijos.





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 Revist a  de  al ce s XXI                              Número  5 , 2021-2023
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