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a favor del derecho de Catalunya a decidir su independen-                                                               político catalán de su audiencia, ubicado en la Generalitat,

         cia, y ante la evidencia consumada de la participación ma-                                                              y la Moncloa.

         siva ciudadana en la consulta, Polònia escenificó un meme                                                                   Por eso el programa en sí no “amenaza” al establishment

         basado en una escena muy conocida de la película El hun-                                                                político catalán, por mucho que se ría de sus políticos y los

         dimiento (Der Untergang, 2004), episodio que presenta a                                                                 parodie junto con los del poder central; ya que es la audien-

         Adolf Hitler (Bruno Gantz) escondido en el búnker poco                                                                  cia misma, la misma audiencia que en la vida real se ha en-

         antes de la caída final y lanzando una enloquecida diatriba                                                             cargado de llevar adelante, en la calle, la intervención po-


         a sus tres íntimos ministros y consejeros. En el meme del                                                               lítica, la que se ríe de sí misma. Polònia, por el contrario,

         programa, Rajoy, como en la escena de Hitler antes de la                                                                riéndose no con él, sino de él, sí irá amenazando, y cada vez

         caída en la película, incapaz de dar cuenta de los territorios                                                          más, al establishment político del poder central. La total y

         ya perdidos (en su caso Catalunya) y de la realidad políti-                                                             absoluta complicidad de Polònia con el imaginario políti-

         ca que le rodea, se esconde en un búnker rodeado de mapas                                                               co de su audiencia y su escenificación burlescamente ten-

         de España y lanza a su plana mayor (Cospedal, Montoro y                                                                 denciosa se convierte entonces para el poder central en una

         Saénz de Santamaría) una diatriba descomunal y alucinada                                                                obscena amenaza, un chiste cínico y hostil que hace a este


         contra Catalunya.                                                                                                       último perder a menudo pie entre realidad y ficción. El PP

             Conforme avanzan los años, la mirada del programa                                                                   llegará incluso a denunciar el programa, tal como ocurrió

         acentúa la mofa de los modos del franquismo así como su                                                                 con el meme comentado, “On s’amagava Rajoy?” (“¿Dónde

         caricaturesca equiparación de éste con las políticas del PP.                                                            se escondía Rajoy?”), por banalizar el nazismo;  acción que
                                                                                                                                                                                                                  27
         Polònia no es un programa ecuánime, todo lo contario. Es,                                                               extiende a Polònia la denuncia real presentada por el PP al

         sin vergüenza ninguna, un programa tendencioso, “un ca-                                                                 presidente de la Generalitat, Artur Mas, a su vicepresiden-

         nal divulgativo de las figuras políticas” que “deja de lado

         otros aspectos de la vida política … Hay acuerdo que no

         se es ecuánime en el tratamiento que se hace de éstas” (Fe-                                                             27  Así reportaba eldiario.es la noticia de la denuncia lanzada a Polònia


         rré y Gayà). Su perspectiva y punto de partida está siempre                                                             por el Partido Popular de Catalunya: “El Partido Popular de Catalu-

         decantado hacia Catalunya, al mismo tiempo que el objeto                                                                nya ha denunciado que el programa Polònia, de TV3, ha utilizado un
                                                                                                                                 meme habitual en Internet (una escena de la película ‘El hundimiento’)
         crítico-cómico de su imaginario se centra en el deseo y la vo-                                                          para colocar a Mariano Rajoy en esa historia. En la escena, el consejo

         luntad soberanista/independentista de su audiencia. Nunca                                                               comunica a Rajoy que tras la consulta del 9-N “el pueblo ha hablado y

         esconde su punto de vista, localizado en y desde Catalun-                                                               han perdido” la comunidad. El PP lo ve como una comparación entre

         ya, ni amaga su afiliación independentista/soberanista. Al                                                              Rajoy y Hitler, y no está muy claro que conozca el éxito que el meme
                                                                                                                                 (usar la escena pero cambiando los subtítulos) ha tenido en Internet.”
         contrario, hace alarde de todo ello y hará gala y explotará al                                                          http://www.eldiario.es/rastreador/PP-denuncia-programa-Polonia-ba-


         máximo la percibida incompatibilidad entre el imaginario                                                                nalice_6_326227381.html






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